Cuentos Infantiles: CUENTO» PULPINO Y SUS AMIGOS, DE HORACIO ALVA. (IMPRENTA MAYÚSCULA)

Marzo 2008
Texto: Horacio Alva
Ilustraciones: Horacio Alva
12 páginas
18 x 24 cm.
Cuento
Letra imprenta mayúscula

Pulpino y sus amigos logran sobrevivir a una peligrosa aventura, descubriendo así el valor de la verdadera amistad.

Horacio Alva, escritor bahiense que desde hace varios años desarrolla –con el auspicio de la Cooperativa Obrera– encuentros narrativos en establecimientos educativos y bibliotecas populares de toda la región, nos ofrece otro de sus cuentos infantiles.

Cuento» PULPINO Y SUS AMIGOS

CUANDO PULPINO REGRESÓ A SU CASA CARACOL DESCUBRIÓ LO DIVERTIDO QUE ES SER PULPO. SE DIO CUENTA, POR EJEMPLO, QUE PODÍA PINTAR OCHO DIBUJOS AL MISMO TIEMPO SIN DISTRAERSE Y RECORDAR ASÍ SUS AVENTURAS, COMO AQUELLA EN LA QUE LOGRÓ ESCAPAR DE UN HAMBRIENTO TIBURÓN.

AL LLEGAR LA PRIMAVERA, A PULPINO LE ENCANTA VIAJAR Y COMPARTIR SU TIEMPO CON LAS BALLENAS. EN OTOÑO, EN CAMBIO, JUEGA CON LOS LOBITOS MARINOS HACIENDO PIRUETAS.

UNA TARDE, MIENTRAS FLOTABA SOBRE EL AGUA DE LA BAHÍA, SE ENCONTRÓ CON SU AMIGO TILÍN, EL GAVIOTÍN MÁS AMIGABLE DE TODA LA PLAYA.

–¡HOLA TILÍN! ¡HOY TENEMOS UN HERMOSO DÍA!, DIJO PULPINO.

Y TILÍN, VOLANDO BAJITO LE CONTESTÓ:

–HERMOSO DÍA SERÁ PARA USTEDES, LOS QUE NADAN CERCA DE LA COSTA. ¿NO SABÍAS QUE HAY UN BARCO PESCANDO MAR ADENTRO?

–¡OH, NO! DEBEMOS IR URGENTE Y ALEJAR A NUESTROS HERMANOS DE LAS REDES, EXCLAMÓ PULPINO.

–ESO SERÍA IMPRUDENTE DE NUESTRA PARTE, RESPONDIÓ SERIO TILÍN. ADEMÁS, YA NO SOY TAN JOVEN COMO PARA VOLAR LEJOS DE LA COSTA. MEJOR ME VOY A QUEDAR EN LA PLAYA BUSCANDO ALGÚN CANGREJO PARA MI MERIENDA.

SIN EMBARGO, PULPINO NO QUISO QUEDARSE DE BRAZOS CRUZADOS Y DECIDIÓ ADVERTIR A LOS DEMÁS DEL PELIGRO. NADÓ MAR ADENTRO HASTA QUE EMPEZÓ A ENCONTRAR EN SU CAMINO GRAN CANTIDAD DE PECES.

–¿A DÓNDE VAS?, LE DECÍAN MUY ASUSTADOS.
REGRESÁ A LA COSTA, ES MÁS SEGURO.

PERO PULPINO NO LES HIZO CASO Y SIGUIÓ AVANZANDO A TODA MARCHA. DE PRONTO OBSERVÓ QUE EL MAR ESTABA MÁS AGITADO QUE DE COSTUMBRE. ASOMÓ SUS OJOS SOBRE LA SUPERFICIE Y LO QUE DESCUBRIÓ LO DEJÓ HELADO.

AUNQUE NUNCA ANTES LOS HABÍA VISTO, SUPO QUE AQUELLAS FIGURAS LEJANAS ERAN LOS PESCADORES SOBRE SU BARCO. UNA INMENSA RED SE ALZÓ FUERA DEL AGUA Y DENTRO DE ELLA MILES DE PECES SE SACUDÍAN INTENTANDO ESCAPAR.

PULPINO SE ESCONDIÓ TEMEROSO EN LO MÁS HONDO Y DE INMEDIATO VIO MÁS REDES DE PESCA. SE QUEDÓ FLOTANDO SUAVEMENTE TRATANDO DE NO LLAMAR LA ATENCIÓN. ALLÍ SE ENCONTRÓ CON PILUSA MEDUSA Y CON TINO TONINA.

–¡VAMOS PULPINO! ¡ES MUY PELIGROSO QUEDARSE ACÁ!, LE GRITARON.

Y JUSTO EN ESE MISMO MOMENTO, SINTIÓ QUE EL MAR SE HACÍA PEQUEÑO Y QUE LOS PECES SE APRETABAN A SU ALREDEDOR. COMPRENDIÓ, DESANIMADO, QUE ESTABA ATRAPADO DENTRO DE UNA RED. LUEGO SE ELEVÓ FUERA DEL AGUA Y PUDO RECONOCER A LO LEJOS LA BAHÍA Y ENTRISTECIÓ, AL PENSAR, QUE QUIZÁS NO VOLVERÍA A DORMIR EN SU CASA CARACOL.

CUANDO MÁS DESOLADO SE SENTÍA, OYÓ UN GRITO DE AVE QUE LO LLENÓ DE FELICIDAD.

–¡TILÍN! ¡YO SABÍA QUE VENDRÍAS!

–¡Y YO SABÍA QUE TE METERÍAS EN PROBLEMAS!

DE INMEDIATO TILÍN COMENZÓ A PELLIZCAR CON SU PICO LAS SOGAS. PRIMERO CORTÓ UNA Y LUEGO OTRA, HASTA QUE LA GRAN RED SE ABRIÓ EN EL AIRE Y TODOS LOS PECES CAYERON LIBRES DE VUELTA AL MAR. PULPINO RECUPERÓ SU COLOR Y JUNTO A SUS AMIGOS EMPEZÓ A NADAR SIN PARAR EN BUSCA DEL REFUGIO DE LAS SUAVES OLITAS DE LA BAHÍA.

Y AL LLEGAR COMPRENDIÓ CON FELICIDAD CUÁN AFORTUNADO ERA, PUES ESE DÍA NO SÓLO LOGRÓ ESCAPAR DE LAS REDES DE PESCA, SINO TAMBIÉN DESCUBRIÓ QUE LOS VERDADEROS AMIGOS JAMÁS NOS ABANDONAN.

FIN

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Visto y leído en: Rincón infantil, pág. 32, Revista Familia COOPERATIVA.
#371 - Año XLIII - OCTUBRE 2016
Cooperativa Obrera - Formato PDF

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